martes, 30 de septiembre de 2008

Apartamento

Pues por suerte, cuando llegué ya tenía el alojamiento buscado por la universidad (claro que como nadie me dijo nada, ¡cómo iba yo a saberlo!), así que dejé mi adorado hostal y me dirigí a la casa para entrar a vivir directamente. Como era algo "oficial" y la cosa del alojamiento estaba mu chunga, me sentí en la obligación de aceptar sin siquiera haberla visitado, cosa que no me preocupó mucho porque, según la descripción de la dueña, iba a ser genial. [Adjunto descripción telefónica]

- Abajo, está la cocina de mi hijo Pablo (su padre es chileno) por la que tienes que pasar para acceder al apartamento
- Pero no te preocupes, que a él le da igual
- Vuestra casa se divide en dos plantas. La baja, donde se encuentra la cocina y el cuarto de Luana (mi compañera de piso brasileña) y la de arriba, donde está tu cuarto y el cuarto de baño.

-----¡No me digáis que no mola la descripción!----------

Así que allí me dirigí, maleta pallá, maleta pacá, suelo empedrao pacá, suelo empedrao pallá, dóndeestálacasa, nolosé. Gracias a mi amigo Murphy, ese fue el único momento en el que tuvo que llover desde que llegué a Gante. Llegué a la casa porque un amigo de Pablo me vio y me identificó, menos mal.

La dueña (Riet) me recibe -yo empapada- y me habla en español (por lo del marido chileno) y me lleva a ver la casa. De momento, todo bien, Pablo resulta ser un 18añero que se ha "independizado", pero que sigue yendo a casa de su madre para comer, lavar la ropa y ver el digital. Tengo que pasar por su cocina, pero nada más. Subo a mi casa (aquí todo son escaleras) y ¡me gusta! La cocina está bien, con un gran ventanal y el cuarto de mi compañera está perfecto. Es entonces cuando subo arriba y... veo mi cuarto-cuarto-de-baño. ¡Sí! Tal como lo digo, es que no hay separación entre ambos, salvo una estantería que cubre aproximadamente la mitad del espacio entre ambas "estancias". Aquí es cuando se me cierran las orejas sobre lo que me explica Riet y pienso. ¿qué hago?, ¿me quedo?, ¡claro!, si no tengo dónde ir... ññññññññññññññeeeeeeeee

------PRESENTACIÓN DE LAS PRUEBAS GRÁFICAS-------

- Prueba gráfica Nº 1: Vista general de la zona de estudio y descanso, desde la escalera


- Prueba gráfica Nº 2 y Nº 3: Detalle de la zona de estudio y de la zona de descanso (presten atención a la estantería y la percha con ropa, a la izquierda)



- Prueba gráfica Nº 4: Vista general de la zona donde se realizan labores varias de limpieza interior y aseo personal, desde la escalera




- Prueba gráfica Nº 5 y Nº 6: Detalle de la zona donde se realizan labores varias de limpieza interior y aseo personal (obsérvese la parte de atrás de la estantería perteneciente a la zona de estudio y descanso así como la percha, en la foto derecha, a la derecha)


Juzguen ustedes mismos...

Así que finalmente, firmo el contrato y me pongo a hablar con Luana mientras deshago la maleta, porque no había hue*** de subir por esa empinada escalera (sí, otra) mi gigante verde. Esa noche cené arroz sólo -qué triste- pero sus razones tenía, la primera porque no tenía comida y la segunda, porque estaba mala del estómago, así que le pedí a mi compi un poquito de arroz que el agua ya la cogía yo del grifo.

Lo peor fue esa noche, que me tuve que hacer un esquema de pros y contras mentales sobre si seguir o no en la casa (está en letra pequeña, porque es mental, si fuera papel, estaría a tamaño normal):

CONTRAS
- No hay separación entre mi cuarto y el cuarto de baño que usamos Luana y yo
- No hay separación entre mi cuarto y el cuarto de baño que usamos Luana y yo
- No hay separación entre mi cuarto y el cuarto de baño que usamos Luana y yo
- No hay separación entre mi cuarto y el cuarto de baño que usamos Luana y yo
- No hay separación entre mi cuarto y el cuarto de baño que usamos Luana y yo
- No hay separación entre mi cuarto y el cuarto de baño que usamos Luana y yo
- No hay separación entre mi cuarto y el cuarto de baño que usamos Luana y yo
- No hay separación entre mi cuarto y el cuarto de baño que usamos Luana y yo

PROS
- La casa está bien, tiene cocina (comparado con lo que vi en los anuncios...)
- Tengo un cuarto-cuarto-de-baño amueblado completamente (no tengo que recoger los muebles que deja la gente en la calle los martes por la noche)
- Tengo una cama doble y otro colchón extra para que venga a visitarme quien quiera
- Si tengo ganas de orinar en mitad de la noche, voilá!
- Luana es buena persona y le gustan las mismas cosas que a mi
- Mientras todo el mundo busca un puente donde dormir, yo ya tengo casa
- Hay plato de ducha y bañera, las dos cosas

Total, que aquí llevo ya desde el martes, casi una semana completa. Va todo bien, cuando Luana madruga más que yo, procura no hacer ruido, pero como no hay paredes, pues me despierto. He hablado con Riet y mañana viene a poner unas cortinas recias en mi espacio vital (algo es algo). Además de que es muy buena persona y me ha prestado la bicicleta mientras llega la mía, así como utensilios de cocina, sábanas, flexo, etc.

Hay algunos contras, como que el niño Pablo tiene montao un "centro social de niñatos belgas en edad de hacer el idiota" al que acuden asiduamente personajes de esas características y donde se montan unos fiestones de música tecno desde las 6 de la tarde que no veas. O que tenemos unos vecinos, también idiotas y de características semejantes a los anteriores especímenes, a los que se les va mucho la cabeza y les da por gritar en la calle o por venir a presentarse a nuestra casa...

Pero bueno, ¡va todo bien!

El próximo día os hablaré sobre el festival de la serie "maderos" (o "la pasma") celebrado aquí el fin de semana.

jueves, 25 de septiembre de 2008

Cómo vivir sin dinero y Pequeños y morenitos compañeros de máster

¿Por qué lo de vivir sin dinero? Puede que alguien se lo haya preguntado...

Pues resulta que quise pagar varias cosas con la tarjeta los primeros días y ¡no funcionaba! Así que fui al banco donde los lectores son mejores y, tampoco! Total, que me quedaban muy poquitos euros en mano y una tarjeta inútil. Entonces aprendí a sobrevivir sin dinero, hay cosas básicas que todo el mundo sabe, pero otras que se aprenden en el momento, así como:

- Beber agua del grifo, con la manita puesta a modo cuenco (esto lo saben los chinos)

- Irte a los puntos de acceso wifi gratuito por la calle y conectarte hasta que se te pase la sed o el hambre

- Cuando hace mucho frío, ir a los puntos de acceso wifi interiores y pedir en la barra un vasito de agua como consumición correspondiente...

- Hincharte de desayunar en el albergue, como está incluído en el precio...

- Coger alguna que otra bolsa de té del desayuno del albergue y calentar agua en el hervidor de quien puedas (en este caso, mis compañeras polacas del albergue)

- Ir a comer a la facultad, ¡oh, no! Si no tengo carné de estudiante. Don't panic! Mira al de atrás de la cola, dile que no tienes carné y que si te puede comprar el bocadillo con el suyo. Ahora te toca comer con él/ella y darle conversación agradable por el favor

- Ir a comer a la fiesta de bienvenida Erasmus, aunque tú no seas ni Erasmus ni bienvenida!

Y bueno, tampoco me hizo falta mucho más porque ya mi mamá se encargó de mandarme el dinero por correo (GRACIAS, PEPI -y lo digo con lágrimas en los ojos-).

Así que después de estas "penurias" y demás otras peripecias, empezaron las clases. Aquí viene la parte de "Pequeños y morenitos compañeros de clase" y es que es así, excepto 5 (los europeos, básicamente y una china) todos son morenitos: de África, de las islas Caribeñas (Maty, ahí está Haiti), de Nepal, del sudeste asiático... Hay una buena diversidad y lo que más me ha extrañado es que, ¡no hay ningún hindú! De momento he tenido sólo tres clases, la que más me está gustando es Economía Agraria, parece un tostón pero el profesor es increíble: el típico profe mayor que llega to arreglao con su corbata y que luego, al terminar la clase, está hecho una piltrafa de lo que se emociona explicando (este se llevó la corbata doblá, las gafas por la parte baja de la nariz, descamisao y todo lleno de tizas de colores).

Con los que más me estoy juntando es con un colombiano, un croata, la filipina, una belga y un belga, a los africanos y asiáticos les cuesta bastante relacionarse, pero ya se irán abriendo...

Sí, cis, ya sé, tengo que escribir sobre el piso pero... para eso necesito preparación. Así que será para la próxima!

martes, 23 de septiembre de 2008

Llegada a Gante (y previos)

Uffffffffffffff ¡Qué bien que ya puedo respirar tranquila!

Eso, después de una semana de locura administrativa... Y si no, que se lo digan a mi Pepi, que hasta tuvo que quedarse en Granada toda una mañana vigilando que los papeles "apostillados" (ya dedicaremos otro capítulo a esto) no se fueran sin ella, mientras yo iba a toda la velocidad que se permite por la DGT a un notario de Málaga.

Tras viaje de un día que puede resumirse en:
- Aeropuerto de Barajas, temprano
- Sandwich del Rodi
lla y té
- Me aburro, que pongan la puerta de embarque, ¡ya!
- Me compro el País
- ...con suplemento
- Me leo el País
- Me leo el suplemento
- Ponen la puerta

- Media hora en la puerta
- Subo al avión (pequeño, por cierto)
- Les dan de comer a los de la clase superior (pero el olor nos llega a todos, mamones!)
- Me releo el País
- Me releo el suplemento
- Les dan café a los de la clase superior (tb llega el olor)
- Me miro las uñas
- Les dan pastel a los de la clase superior (este no huele, pero se ve)

- Llegada a Bruselas
- Espero el tren 45 minutos
- Me hago un horario
- Subo al tren
- Me leo el País por tercera vez
- Me leo el suplemento por tercera vez
- Primera incursión en las páginas salmón del País (¿salmón?, qué hambre)

"Los recortes de tipos de interés, las inyecciones masivas de fondos de los bancos centrales y los rescates millonarios de los últimos meses apenas han causado efecto. Son meros emplastos. Las Bolsas se hunden ante un panorama cada vez más preocupante."

- Dejo las páginas salmón
- Miro el paisaje túnel-cultivo-túnel-bosque-casa-túnel-cultivo-túnel-bosque-cultivo-cultivo
- Llegada a Gante, estación Sint-Piters (que es como San Peter, pero dicho por un gitano, ayyyyyy sinnnn piiiiiiiiters)

Aquí ya llega la parte en que se me nubla la vista del hambre, pero como voy con mi hijo (llamémosle así a mi maleta Roncato de 120 litros de capacidad) quiero llegar cuanto antes al albergue.

- Pregunto por el tranvía que tengo que coger
- No se aclaran
- Me mandan a una parada
- No es
- Vuelvo a preguntar
- Me voy al que me da la gana
- Me bajo a medio kilómetro y me echo a andar con mi mapa
- ¡Sorpresa! No me pierdo
- Agradezco al alcalde de Gante el hecho de tener toda la ciudad empedrada, así es mejor para hacer biceps mientras tiras de la maleta
- 2 km...
- 2.5 km andando...
- 3 km...
- ¡¡FREIDURÍA!!
- Paso de mi hijo (también llamado Gigante Verde), no creo que nadie se lo lleve
- Pido unas papas fritas, con mahonesa, medianas
- Me siento (son las 20h.) a comer
- Sigo comiendo (son las 20.15)
- Me empiezo a empachar
- Dejo una parte de las papas
- 4 km...
-¡¡HOSTAL!!

Aquí conocí a dos polacas y dos pucelanas que dormían en mi mismo cuarto, muy buen ambiente. El cuarto no sé cómo es porque sólo había maletas por todas partes. Las pucelanas dicen las palabras mágicas "INTERNET+CERVEZA", así que vamos pallá (es la que está en una plaza pequeña y tenía dos plantas donde nos comimos los bocatas de chorizo y queso con Luis y Marta -para los que estuvieron-).

Y de ahí a dormir!

Ya os seguiré contando. Creo que ya tengo título para el siguiente blog "Cómo vivir sin dinero y Pequeños y morenos compañeros de máster".

Muack